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Una gran parte de las emisiones europeas de gases de efecto invernadero proviene de la construcción. Para alcanzar los ambiciosos objetivos climáticos de la Unión Europea, el Pacto Verde Europeo exige al sector que reduzca estas emisiones en un 60% de aquí a 2030. Para ello, la mejor opción que tiene Europa es aprovechar el enorme potencial del uso de soluciones innovadoras de base biológica en la construcción como la madera que permiten lograr emisiones negativas (o al menos nulas) en nuestras ciudades.
Un bosque productivo gestionado de forma sostenible es la mejor solución natural para absorber emisiones, y esta es una razón clave por la que el uso de madera en las construcciones es una de las soluciones de mayor impacto para descarbonizar la arquitectura.
Además, la madera maciza industrializada tiene características que la hacen idónea para la transición hacia una bioeconomía circular sostenible. Entre sus atributos diferenciales, en comparación con otros materiales de construcción como el hormigón, destacan: es un material de origen renovable, promueve la gestión forestal sostenible, almacena CO2, es un material ligero y fácil de transporta, es buen aislante y material estructural, altamente industrializable y facilita la prefabricación para una construcción más rápida, con mayor control y precisión, y genera menos contaminación y riesgos in-situ.
La madera está diseñada para su implementación generalizada y a gran escala. Se prevé que la capacidad de producción de madera contralaminada (CLT) en España crezca un 227% en los próximos tres años. Sin embargo, la falta de habilidades y conocimientos sobre la madera diseñada en el ecosistema de la construcción sigue siendo uno de los principales obstáculos para esta transición verde.
La promoción de la formación es de hecho uno de los fundamentos asociados al uso de madera maciza industrializada en edificación y uno de los puntos que recoge el Decálogo del “informe 2023-24 Mass Madera” que se presentó el pasado mes de enero en Valencia con el objetivo de que la formación en edificación con madera llegase a formar parte del currículum obligatorio de las escuelas de arquitectura e ingeniería.
Mientras esta premisa llega a implementarse en las escuelas de arquitectura de España, como ya ocurre en otros centros europeos como la Universidad Aalto de Helsinki, en Finlandia, el Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC) ha creado el que es el primer “Programa Profesional en Edificación Industrializada con Madera” que tendrá lugar en otoño de 2024 y que está dirigido por Daniel Ibañez y Vicente Guallart.
“En este momento que hay gran crecimiento en España de construcción de viviendas públicas, especialmente en régimen de alquiler, se debería impulsar el proceso de descarbonización de la edificación, de forma que se logren tres objetivos simultáneamente: ofrecer más viviendas sociales a los ciudadanos, luchar contra el cambio climático y fomentar la gestión forestal y la economía rural en España” afirma Vicente Guallart, co-director del programa.
El programa profesional aborda la necesidad de mejorar y actualizar las habilidades de los trabajadores en el sector de la construcción, con especial énfasis en aumentar la calidad y cantidad de oportunidades de capacitación. El objetivo es establecer una base sólida para el diseño y construcción de edificios industrializados con madera dirigido a profesionales de la arquitectura, de la ingeniería, de las empresas públicas de vivienda, de empresas constructoras, administraciones y fondos de inversión que estén involucrados en el diseño y la construcción de esta nueva generación de edificios.