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Duravit, empresa especialista en diseño de cerámica sanitaria, muebles de baño, accesorios, bañeras, hidromasajes, cabina y platos de ducha, mini-piscinas y saunas, cree que el ‘wellness’ ya no es solo sinónimo de relajación y cuidado corporal, sino también una prevención de salud e intercambio de comunicación.
Por ello han lanzado las variantes para interiores de las piscinas Sundeck y Blue Moon, con tres circuitos en el interior para una mayor relajación y que convierten el espacio exterior en un spa privado. El núcleo lo constituyen el circuito "Emotion" y sus 24 jets "Durapearl", situados en el fondo. El circuito "Power" utiliza unos jets de gran tamaño que propulsan un fuerte chorro de agua que masajea enérgicamente los músculos tensos. La potencia del chorro de masaje se regula directamente abriendo y cerrando el jet. Los masajes en los pies y la columna vertebral deben ser más suaves. De ellos se ocupa el tercer circuito. Sus jets realizan el masaje con un chorro más suave y parte de ellos giran para poder abarcar la mayor superficie posible. El efecto de este "circuito Relax” es un complemento del "circuito Power".
Todos los circuitos pueden accionarse por separado o conjuntamente. El usuario puede controlar el programa deseado mediante un mando a distancia estanco al agua. La luz del LED de color fijo o los diversos programas, dan una intensidad adicional al ambiente: tanto en la piscina como en el jardín.
El revestimiento acrílico blanco o las distintas superficies de madera, como Wengé o Cerezo, convierten las piscinas, también, en objetos decorativos que, además, se pueden cubrir con unas resistentes tumbonas acolchadas. Estos acolchados blancos, cosidos a mano, transforman las piscinas en amplias tumbonas para reposar después del baño. Para bañarse basta con retirar y plegar la tumbona.
