Pérgolas y cenadores, una idea inteligente para estar en armonía con la naturaleza

Por eso, al planificar y diseñar espacios exteriores, considerar instalar una pérgola o un cenador, es una idea inteligente. Entre otras ventajas, ya que las condiciones meteorológicas no limitarán el disfrute de las áreas externas de tu hogar o comercio. Así, podrás expandir el espacio disponible para tus actividades, aportando además, atractivos elementos decorativos a cualquier lugar.

Así, obtener el máximo bienestar de tus exteriores, es posible. Esto, gracias a la instalación de un recurso tan práctico como un cenador o una pérgola. Podrás aprovechar todo su potencial, para estar en armonía con la naturaleza, disfrutando de espacios estéticamente acordes a tu gusto. Además, ayudan a proteger tus áreas verdes de las inclemencias del tiempo, especialmente del sol y el viento.

Por ejemplo, en función de tus requerimientos, podrás buscar diferentes tipos de pérgolas. Porque, al seleccionar la pérgola adecuada, podrás transformar, prácticamente por completo, cualquier exterior. Puedes dar el toque estético que necesitas y aprovechar las distintas funcionalidades en función del ambiente que deseas. En este sentido, existen diversos tipos de pérgolas, acorde al diseño, material y uso.

Uno de los aspectos a tomar en cuenta al seleccionar una pérgola, son los materiales usados en su fabricación. Esto, porque juegan un papel clave en lo referente a su durabilidad, estética y mantenimiento. Es por ello que debes prestar mucha atención en escoger materiales de primera para que tu pérgola sea realmente la solución que buscas. Entre las opciones destacadas de pérgolas que encuentras en el mercado están las siguientes.

 

Actualmente,  las pérgolas de aluminio, a nivel estético, constituyen una verdadera tendencia en la decoración de exteriores. En el mercado es posible encontrar diversos y atractivos estilos, medidas y colores. Brindan un sinfín de posibilidades decorativas y soluciones prácticas, al ser adaptables a cualquier entorno.

Estas pérgolas se han popularizado porque además de resultar atractivas, resultan seguras y ligeras, ameritando poco mantenimiento. Si requieres una solución duradera y resistente a factores climáticos adversos como la corrosión, este tipo de pérgola es lo ideal.

 

 

La madera, para los decoradores, constituye uno de sus elementos favoritos. Así, las pérgolas de madera, en lo referente a su estética, son muy populares. Hacen una magnífica combinación con los espacios abiertos, integrándose perfectamente como elemento natural, en jardines y terrazas. Lo mejor es que añaden un toque cálido a cualquier hogar. Eso sí, es importante acotar que requieren alto mantenimiento como barnizado o tratamientos especiales contra plagas y factores climáticos adversos.

 

 

Estas se caracterizan por ser estructuras muy resistentes, que según lo requieras, pueden variar la estética de tus espacios exteriores. Pueden aportar a cualquier espacio elegantes toques clásicos o darle un aspecto rústico y atractivo. Tienen la gran ventaja de ser muy duraderas, si se les proporcionan adecuados tratamientos anticorrosión.

 

Constituyen una opción económica y resultan muy livianas. Adecuadas para montajes sencillos y rápidos. El PVC es un material que soporta bien la humedad, además, es sencillo de limpiar. Sin embargo, puede no resultar tan duradero, ni brindar las mismas prestaciones a nivel decorativo, como otros materiales.

Tener en cuenta el diseño de la pérgola es vital. Se refiere a la forma, colores y materiales para que la pérgola se integre al entorno, pero también implica la funcionalidad del accesorio. Hay diversas opciones.

 

Estas pérgolas se instalan pegadas a una pared. Así, prácticamente se convierten en una atractiva extensión de tu hogar o comercio. Son adecuadas para terrazas o patios, puesto que proporcionan protección contra factores climáticos como el sol o la lluvia, sin ocupar mucho espacio. Estéticamente, dan continuidad a los ambientes y proporcionan una excelente solución ante la necesidad de requerir más espacio disponible.

 

Si deseas disfrutar de un lugar especial para disfrutar de la naturaleza, ésta es la opción ideal. Porque estas pérgolas se instalan por separado. Son adecuadas al requerir diseñar áreas sombreadas aisladas, como zonas de relax en el jardín o espacio exterior. Brindan gran flexibilidad en lo relativo a su ubicación. Ideales para crear espacios apropiados para compartir con niños o mascotas, por ejemplo, protegiendo columpios o áreas de esparcimiento.

 

En la actualidad, también se ha hecho usual la instalación de pérgolas bioclimáticas. Este tipo de pérgolas está fabricado con lamas que son orientables. Estas se ajustan automáticamente para brindar una mayor ventilación y protección solar. Permite controlar los niveles de luz y temperatura, siendo amigables con el ambiente, brindando eficiencia energética y comodidad. Requieren buen mantenimiento y no son tan accesibles como otros tipos de pérgolas.

Las pérgolas también se pueden clasificar de acuerdo a su uso, siendo las más comunes:

Como verás, las pérgolas y cenadores resultan excelentes y modernas soluciones para optimizar el uso de tus áreas exteriores. Con ellos, puedes obtener mayor espacio habitable, ganando sombra y mejorando la estética del entorno.