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Existen muchas maneras de utilizar el agua potable de manera responsable y sostenible. La presión del agua en tuberías también es un factor importante.
Una presión de agua demasiado alta puede dañar las tuberías, los accesorios y los dispositivos instalados. También puede ser la causa de instalaciones “ruidosas” debido a que el agua provoca turbluencia en los grifos, provocando ruidos molestos. Además, si la presión es demasiado alta, se producen gastos innecesarios y se desperdician recursos.
Resideo explica cómo funcionan los reguladores de presión y por qué la presión correcta del agua es tan importante.
La presión de agua se puede regular con el uso de válvulas reductoras de presión en la instalación de agua sanitaria.
Las válvulas reductoras de presión se utilizan normalmente en la conexión de agua sanitaria, directamente detrás del contador de agua y del filtro de agua potable. El agua de la red de suministro público entra a alta presión por el lado de entrada de la válvula reductora de presión y fluye hacia las tuberías de agua doméstica a la presión deseada, que es ajustada por el técnico.
La reducción de presión dentro de la válvula se basa en el principio de comparación de fuerzas: dependiendo de las condiciones de presión, un muelle cierra o abre la válvula más o menos para reducir o mantener la presión de entrada en un valor preestablecido.
Especialmente cuando la presión del agua es alta o fluctúa, tiene sentido instalar accesorios para regular y reducir la presión del agua. Si la presión media en el punto de consumo supera los 5 bar, incluso es obligatorio instalar un reductor de presión.
