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2.000 hogares vascos de titularidad pública están mejorando su confort térmico gracias al proyecto piloto Stechome basado en el acompañamiento energético.
Un estudio creado por los investigadores de la Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibersitatea Silvia Pérez-Bezos, Olatz Grijalba y Rufino Javier Hernández Minguillón, junto a la investigadora de la Eindhoven University of Technology Olivia Guerra-Santín, ha concluido que los usos, hábitos y preferencias de los residentes en las viviendas sociales vascas influyen en el rendimiento de los edificios a nivel de eficiencia energética y bienestar de los habitantes.
La investigación se ha realizado a partir del monitoreo de 58 viviendas de un edificio de viviendas sociales de alquiler público en el País Vasco. Los resultados mostraron una falta de asociación entre el confort térmico percibido y el monitoreado, así como una variabilidad significativa en el uso de la vivienda entre perfiles socioeconómicos similares.
La consultora de gestión energética Stechome, en colaboración con diferentes administraciones del País Vasco, están llevando a cabo el proyecto E-Lagun que usa las recomendaciones del estudio realizado por la UPV/EHU.
El objetivo es dar apoyo a las familias usuarias de 2.000 viviendas públicas en sus decisiones relacionadas con la energía.
En primer lugar, se ha desarrollado el “Manual Energético del Inquilino” para proporcionar información esencial sobre la gestión de la energía en el hogar
En segundo lugar, Stechome ha formado durante estos dos últimos años a 60 personas, que conformarán la nueva figura del Acompañante Energético: un asistente para las familias que revisa el estado de las viviendas, repasa aspectos de la factura eléctrica y de calefacción, y les asesora para optimizar y ajustar sus tarifas eléctricas y de gas natural ayudándoles a tener unos buenos hábitos de consumo, además de actuar como representante frente a terceros.