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La subida del precio del gas, el cote de vida de los consumidores debido a la crisis energética, ha conseguido que muchos hogares estén cada vez más preocupados por sus facturas energéticas. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, Idae, el mayor gasto energético en las viviendas se encuentra en la climatización del hogar, más específicamente en la calefacción, lo que representa en ocasiones la mitad de la factura de la luz y en las zonas más frías incluso el 71%.
Con sistemas de aislamiento térmico como es el Sate, se puede reducir en gran cantidad el gasto energético, hasta un 60% en algunos casos. En cambio, según la Ocu, con el aislamiento de ventanas se puede ahorrar el 20% en la factura eléctrica.
El Gobierno ha dividido el Plan de Rehabilitación de Vivienda y Regeneración Urbana en seis programas. Uno de ellos va dirigido a la subvención de actuaciones con las que se mejore la eficiencia energética de la vivienda. El cambio de ventanas es una de las actuaciones que serán subvencionables siempre que cumplan los siguientes requisitos.
En primer lugar, que el cambio de ventanas reduzca la demanda energética anual global de calefacción y refrigeración en al menos un 7%, o una reducción del consumo de energía primaria no renovable de al menos un 30%. Y en segundo lugar, que haya actuaciones de modificación o sustitución de elementos constructivos de la envolvente térmica para adecuar sus características a los valores límite establecidos en el CTE.
Para demostrar que se han logrado los objetivos, se debe obtener una mejora en el certificado de eficiencia energética. Y se deberán aportar las facturas de las obras realizadas. Este programa, además, plantea deducciones en el IRPF para los ejercicios de 2021, 2022 y 2023, lo que quiere decir que quedará reflejado en la declaración de la Renta, para los particulares que realicen obras en su vivienda habitual en relación con el cambio de ventanas.
Desde la marca indican que “en términos de aislamiento y eficiencia energética, las ventanas con sistemas Kömmerling se caracterizan por ofrecer unos de los mejores valores del mercado, alcanzando sobradamente lo exigido en las normativas”.
La solicitud de estas subvenciones supone, en la mayoría de los casos, la contratación de un Agente Rehabilitador y el cumplimiento y justificación de una serie de requisitos. Una gestión que no siempre resulta sencilla y por ello Kömmerling ha articulado un servicio de gestión de las ayudas de los fondos Next Generation para el cambio de ventanas y con las que se puede alcanzar hasta un 52% de subvención., hasta 4.000 euros.