Empresas Premium
La facturación agregada de las cuarenta principales sociedades inmobiliarias alcanzó los 11.570 millones de euros en 2021, cifra que se situó un 27,6% por encima de la contabilizada en 2020, según el Observatorio Sectorial DBK de Informa. Así, se superó el impacto negativo de la pandemia de la Covid-19, el sector inmobiliario recuperó la tendencia alcista, con un fuerte repunte de la inversión en un contexto de alta liquidez y bajos tipos de interés.
Respecto al valor de la producción de viviendas, superó en el año 2021 los 66.000 millones de euros. La finalización de trabajos que se iniciaron antes de la pandemia propició un aumento del número de viviendas terminadas + 8,2%, mientras que las viviendas iniciadas aumentaron un 28,5%. Por el lado de la demanda, los bajos tipos de interés y la alta liquidez impulsaron las operaciones de compraventa + 38,3%.
En cuanto al valor de otros edificios y construcciones, creció un 8,1% en 2021, hasta los 55.900 millones, recuperando gran parte de la actividad perdida en 2020. El mercado inmobiliario no residencial también registró un buen comportamiento, destacando la reactivación del segmento de oficinas y las inversiones en espacios logísticos y turísticos, entre otros.
Las perspectivas para el final de 2022 apuntan a un empeoramiento de la actividad y la rentabilidad sectorial, ya que habrá una subida de tipos de interés, crecimiento de los costes de producción y pérdida de poder adquisitivo de la población ante la escalada inflacionista.
El sector presenta una elevada atomización de la oferta, contando con un alto número de pequeñas empresas. Alrededor del 95% tenían menos de tres empleados. Solo un centenar de compañías contaba con 50 trabajadores o más en plantilla.