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Los datos del sector renovable publicados por la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA), demuestran tanto en empleo como en potencia instalada el enorme potencial de las tecnologías limpias. Camino que de manera decidida han emprendido los 195 países suscritos al Acuerdo de la COP21 en París.
Según el informe “Energía renovable y empleo” de Irena, en 2015 el empleo en el sector renovable creció un 5% con respecto a 2014, hasta alcanzar 8,1 millones de personas (9,4 millones de empleos si se tiene en cuenta la gran hidráulica). Según esta misma agencia, la capacidad de generación eléctrica con energías renovables aumentó en 151.500 MW, hasta alcanzar 1.985.074 MW instalados, mientras que en España tan solo se instalaron 23MW de nueva capacidad renovable. El llamado empleo verde crece en todos los países mientras que se mantiene estancado en España.
Mientras que hasta hace unos años España era líder en el sector, pero desde 2008 se han perdido la mitad de los puestos de trabajo. La pérdida de empleo se ha dado en casi todas las renovables, fruto de las políticas adversas puestas en marcha en el sector eléctrico.
El informe destaca que el país que genera más empleos renovables es China con más de 3,5 millones de puestos de trabajo, seguida de Brasil con 918.000, EEUU con 770.000, India con 416.000 y Japón con 388.000. Europa en su conjunto emplea a 1,17 millones de personas. España, que cuenta con abundantes recursos renovables, debería aprovechar la oportunidad para atraer inversiones a un sector clave en la economía mundial y en el que hace pocos años el país ocupaba una posición de liderazgo.