Empresas Premium
Manuel López Segura presenta en Harvard una exposición sobre la arquitectura valenciana de los años 80 y su implicación en la recuperación de la democracia. El Teatro Romano de Sagunto, el Ivam y el Parque Fluvial del Túria, entre otros, presentes en una de las principales universidades del mundo.
Manuel López Segura, licenciado en arquitectura por la Universidad Politécnica de Valencia, presenta en Harvard una colección de libros y obras gráficas que recogen la contribución de la arquitectura valenciana a la construcción de la democracia y del estado del bienestar, así como a la recuperación de la identidad regional.
El joven, que actualmente cursa el Doctorado en Arquitectura y Urbanismo en la Graduate School of Design de la Universidad de Harvard (Cambridge, Massachusetts, EE.UU.), ha sido galardonado, gracias a esta colección, por el jurado del Premio Philip Hofer, que concede la Biblioteca Houghton de dicha universidad.
Esta muestra, que se acaba de inaugurar y que se podrá visitar hasta el mes de abril en la biblioteca de arquitectura de la Universidad de Harvard, ofrece un recorrido por la arquitectura valenciana de aquellos años a través de siete temas fundamentales: el activismo urbano; la planificación municipal y territorial; los equipamientos públicos, museos y políticas para las artes; la conservación del patrimonio construido; la investigación histórica y las instituciones arquitectónicas, profesionales y educativas.
López Segura considera que la exposición demuestra “como la democracia brindó la posibilidad de explorar nuevas vías arquitectónicas gracias al carácter abierto del nuevo régimen, a la colaboración entre arquitectos y políticos socialdemócratas, y a la conquista de competencias autonómicas”. En su opinión “la Arquitectura valenciana de los años 80 está enraizada en la realidad de su lugar y de su sociedad, comprometida con los ciudadanos, y tan abierta al exterior como orgullosa de su idiosincrasia”.
Así, esta exposición permite conocer diferentes instituciones y proyectos, como el Instituto de Arte Moderno (Ivam), el Colegio de Arquitectos, la Escuela de Arquitectura, el Teatro Romano de Sagunto o el Parque Fluvial del Túria.
Todo ello presentado a través de varias decenas de libros sobre arquitectura valenciana como “Arquitectura en Valencia durante la II República” del COACV (1986), “Jornades sobre el Patrimoni Arquitectònic i Urbanístic al País Valencià” del COAVM (1979) o “Arquitectura sanitària valenciana” de Joan Calduch Cervera (1991), así como de posters, por ejemplo los diseñados por Artur Heras o Manolo Boix para la Generalitat, y de objetos manufacturados, como el maletín de juegos que produjo el artista fallero Manolo Martín con ocasión del proyecto del parque infantil Gulliver.
Con esta exposición la Universidad de Harvard apoya la investigación interdisciplinar en los campos de la arquitectura y las demás artes, de la historia de la arquitectura y de la política, a la vez que reconoce la relevancia cultural de la arquitectura valenciana durante la primera década de la democracia.